Un primer plato sabroso y cremoso, perfecto para los amantes de la pasta. Las farfalle se combinan a la perfección con la salchicha y los calabacines, creando una sinfonía de sabores. Un plato que se inspira en la cocina italiana, con un toque de originalidad.
Derretir 20 g de mantequilla en una sartén, añadir la salchicha pelada y cortada en cubitos y dorarla ligeramente; agregar los calabacines cortados en rodajas
Salpimentar y cocinar durante unos 20 minutos hasta que los calabacines estén tiernos pero no deshechos
Aparte, rallar el queso Gruyère
Derretir en un cazo 50 g de mantequilla, incorporar la harina y diluir con la leche añadida poco a poco y siempre removiendo
Condimentar la bechamel con sal, pimienta y nuez moscada y cocinar durante unos 15 minutos (hasta que alcance una consistencia cremosa) continuando siempre a remover
Hervir abundante agua salada y añadir las farfalle, escurrirlas al dente y condimentarlas con los calabacines y la bechamel
Engrasar una fuente para horno, hacer una capa de pasta y distribuir encima la mitad del queso Gruyère rallado
Verter en la fuente la pasta restante y distribuir encima el queso Gruyère rallado restante
Colocar la fuente en el horno precalentado a 200 grados durante unos 15 minutos
Sartén
Olla para pasta
Italia
Energía (kcal) | 198,82 |
Carbohidratos (g) | 20,25 |
de los cuales Azúcares (g) | 2,99 |
Grasas (g) | 9,78 |
de los cuales saturados (g) | 5,05 |
Proteínas (g) | 8,29 |
Fibra (g) | 0,89 |
Venta (g) | 0,22 |