

Maredsous Bruin es más que una simple cerveza: es una experiencia sensorial que nos transporta a los monasterios belgas, donde la tradición cervecera se ha transmitido durante siglos. Nacida de la antigua receta de los monjes benedictinos de la Abadía de Maredsous, esta cerveza oscura y robusta es una verdadera joya de la producción cervecera belga. Su color ámbar oscuro, casi marrón, anticipa un perfil aromático complejo y envolvente. En nariz, se perciben intensas notas de malta caramelizada, que recuerdan al pan recién horneado, unidas a matices de frutas secas, como ciruelas y pasas, y a delicadas especias que aportan una agradable complejidad. En boca, la Maredsous Bruin se revela suave y aterciopelada, con un equilibrio perfecto entre dulzura y amargor. El cuerpo es pleno y redondo, sostenido por una carbonatación fina y persistente. Las sensaciones gustativas están dominadas por notas de chocolate negro, café y toffee, que se funden con un ligero toque de regaliz y un final amargo que deja una agradable sensación de frescura. La historia de la Maredsous Bruin está estrechamente relacionada con la de la Abadía de Maredsous. Los monjes benedictinos, además de dedicarse a la oración y al estudio, siempre han cultivado una profunda pasión por la cerveza, considerada un alimento esencial y un símbolo de hospitalidad. A lo largo de los siglos, han perfeccionado sus técnicas de producción, dando vida a cervezas de gran calidad, entre las que se encuentra la famosa Maredsous Bruin. La Maredsous Bruin es una cerveza versátil, que se presta a numerosos maridajes gastronómicos. Su estructura robusta y su intenso sabor la hacen ideal para acompañar platos contundentes y sabrosos. Aquí algunos sugerencias: Quesos curados: La Maredsous Bruin realza las notas saladas y aromáticas de quesos como el Gouda curado, el Cheddar o el Gruyère. Carnes rojas: El maridaje con asados, guisos y trampas de carne roja es clásico y siempre ganador. Chocolate negro: La dulzura del chocolate negro encuentra la complejidad de la cerveza, creando una combinación irresistible. Postres: Maredsous Bruin también se puede utilizar para preparar postres originales, como mousse de chocolate o tartas de caramelo. Maredsous Bruin es una cerveza que debe ser disfrutada con calma, apreciando todos sus matices aromáticos. Sírvala en una copa tipo tulipán, a la temperatura ideal de 8-10°C, y deje que su aroma embriagador lo transporte a un mundo de sabores y sensaciones.
Precio IVA incluido
Maredsous Bruin es más que una simple cerveza: es una experiencia sensorial que nos transporta a los monasterios belgas, donde la tradición cervecera se ha transmitido durante siglos. Nacida de la antigua receta de los monjes benedictinos de la Abadía de Maredsous, esta cerveza oscura y robusta es una verdadera joya de la producción cervecera belga. Su color ámbar oscuro, casi marrón, anticipa un perfil aromático complejo y envolvente. En nariz, se perciben intensas notas de malta caramelizada, que recuerdan al pan recién horneado, unidas a matices de frutas secas, como ciruelas y pasas, y a delicadas especias que aportan una agradable complejidad. En boca, la Maredsous Bruin se revela suave y aterciopelada, con un equilibrio perfecto entre dulzura y amargor. El cuerpo es pleno y redondo, sostenido por una carbonatación fina y persistente. Las sensaciones gustativas están dominadas por notas de chocolate negro, café y toffee, que se funden con un ligero toque de regaliz y un final amargo que deja una agradable sensación de frescura. La historia de la Maredsous Bruin está estrechamente relacionada con la de la Abadía de Maredsous. Los monjes benedictinos, además de dedicarse a la oración y al estudio, siempre han cultivado una profunda pasión por la cerveza, considerada un alimento esencial y un símbolo de hospitalidad. A lo largo de los siglos, han perfeccionado sus técnicas de producción, dando vida a cervezas de gran calidad, entre las que se encuentra la famosa Maredsous Bruin. La Maredsous Bruin es una cerveza versátil, que se presta a numerosos maridajes gastronómicos. Su estructura robusta y su intenso sabor la hacen ideal para acompañar platos contundentes y sabrosos. Aquí algunos sugerencias: Quesos curados: La Maredsous Bruin realza las notas saladas y aromáticas de quesos como el Gouda curado, el Cheddar o el Gruyère. Carnes rojas: El maridaje con asados, guisos y trampas de carne roja es clásico y siempre ganador. Chocolate negro: La dulzura del chocolate negro encuentra la complejidad de la cerveza, creando una combinación irresistible. Postres: Maredsous Bruin también se puede utilizar para preparar postres originales, como mousse de chocolate o tartas de caramelo. Maredsous Bruin es una cerveza que debe ser disfrutada con calma, apreciando todos sus matices aromáticos. Sírvala en una copa tipo tulipán, a la temperatura ideal de 8-10°C, y deje que su aroma embriagador lo transporte a un mundo de sabores y sensaciones.