Las alcachofas a funghetto son una guarnición sabrosa y llena de sabor, preparada con alcachofas frescas y especias. Esta receta es típica de la cocina romana y tiene orígenes antiguos. Las alcachofas se cortan en cuartos y luego se fríen con aceite de oliva, ajo, aceitunas negras de Gaeta y alcaparras para obtener una textura crujiente y un sabor irresistible. El perejil fresco se añade para un toque de frescura. Esta guarnición combina perfectamente con muchos platos principales y puede servirse tanto caliente como fría.
Retirad las hojas más duras de las alcachofas y cortadlas en cuartos, eliminando en el interior la parte dura y peluda
Ponedlas en remojo en agua acidulada con un limón o con un puñado de harina para que no se pongan negras
Mientras tanto, en una sartén dorad el ajo en el aceite y, en cuanto esté dorado, añadid las alcachofas
Cubridlas y dejadlas cocer a fuego medio
Cuando la cocción esté casi terminada, añadid las aceitunas deshuesadas, las alcaparras desaladas, un poco de sal y pimienta
Al final, añadid el perejil picado
Las alcaparras y las aceitunas son opcionales
Sartén
Cuchillo
Tabla de cortar
Conservar en el frigorífico en un recipiente hermético como máximo 2 días
Este plato es típico de la cocina romana
Italia, Lazio
Energía (kcal) | 140,38 |
Carbohidratos (g) | 2,16 |
de los cuales Azúcares (g) | 1,68 |
Grasas (g) | 12,64 |
de los cuales saturados (g) | 1,81 |
Proteínas (g) | 2,33 |
Fibra (g) | 4,59 |
Venta (g) | 0,14 |