La tarta suave de ricotta y peras es un dulce alto y esponjoso ideal para el desayuno y la merienda. Una tarta sin mantequilla ni aceite; el componente graso proviene simplemente de la ricotta de vaca. La tarta se enriquece además con abundantes peras Abate cortadas en trozos, que hacen este dulce aún más sabroso.
Para preparar la tarta suave de ricotta y peras, empieza pelando las peras, quítales el corazón y córtalas en cubitos bastante pequeños. Colócalas en un bol con muy poco zumo de limón para que no se oxiden.
Bate con un batidor (o con una amasadora) el azúcar con la ricotta, añade entonces las semillas de la vaina de vainilla. Incorpora después los 3 huevos uno a uno y continúa montando la mezcla.
Añade la ralladura de limón. Tamiza la harina con la levadura y agrégalas a la mezcla, mezclando con una cuchara de madera hasta obtener una masa lisa.
Incorpora las peras en cubitos y mézclalas con la masa. Engrasa y enharina bien un molde desmontable de 24 cm de diámetro, vierte la masa en el molde y nivélala bien ayudándote con una espátula.
A continuación, hornea la tarta a 180°C (horno estático) durante 50-70 minutos, hasta que al insertar un palillo de madera en el centro de la tarta, este salga seco.
Saca la tarta suave de ricotta y peras del horno, déjala templar, desmóldala y espolvoréala con azúcar glas antes de servirla.
La tarta suave de ricotta y peras se conserva 2-3 días bajo una campana de cristal. Si lo deseas, puedes congelar la tarta una vez cocida y fría.
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Energía (kcal) | 172,43 |
Carbohidratos (g) | 25,41 |
de los cuales Azúcares (g) | 14,61 |
Grasas (g) | 3,96 |
de los cuales saturados (g) | 1,99 |
Proteínas (g) | 5,89 |
Fibra (g) | 1,86 |
Venta (g) | 0,15 |