El Parmigiano Reggiano Prodotto di Montagna es un queso DOP de gran prestigio, producido en montaña según estrictos estándares de la UE que garantizan la calidad y el origen. Elaborado con leche cruda proveniente exclusivamente de establos de montaña y una alimentación en gran parte cultivada en zona montañosa, este Parmigiano pasa por una selección cuidadosa a los 20 meses, con una evaluación experta "al martillo" por parte del Consorcio. Con una maduración de 30 meses, desarrolla un perfil organoléptico complejo y profundo, perfecto para quienes aman los sabores intensos y bien estructurados. Aspecto: Forma cilíndrica tradicional con corteza dura. Pasta de color amarillo pajizo intenso, sin ojos o con ojos pequeños. Estructura: Granulosidad bien evidente, consistencia compacta y muy quebradiza, con numerosos cristales de tirosina que enriquecen la textura y ofrecen un crujido natural. Olor y aroma: Complejos e intensos, con notas de frutos secos, caldo de carne y un toque especiado de nuez moscada, típicos de una larga maduración en montaña. Sabor: Con una salinidad predominante y menos dulzura, está acompañado de un ligero picante que añade profundidad e intensidad al gusto. Maduración: 30 meses. Maridajes recomendados: miel de castaño, perlas de vinagre balsámico de Módena IGP y trufa, compota de higos y vinagre balsámico de Módena IGP, gelatina de vinagre balsámico de Módena IGP, crema de vinagre balsámico de Módena IGP y frutos del bosque, puré de arándanos silvestres, Savòr Modenese, cerveza Doppelbock o cerveza oscura, vinos como Barolo, Amarone y Riesling de montaña, pan integral o crostinis rústicos. Ideal para degustar puro o acompañado de frutos secos y vinos tintos con cuerpo para un maridaje sofisticado. Se recomienda un cuchillo almendra para quesos curados, perfecto para romper el queso manteniendo su textura quebradiza.
Precio IVA incluido
El Parmigiano Reggiano Prodotto di Montagna es un queso DOP de gran prestigio, producido en montaña según estrictos estándares de la UE que garantizan la calidad y el origen. Elaborado con leche cruda proveniente exclusivamente de establos de montaña y una alimentación en gran parte cultivada en zona montañosa, este Parmigiano pasa por una selección cuidadosa a los 20 meses, con una evaluación experta "al martillo" por parte del Consorcio. Con una maduración de 30 meses, desarrolla un perfil organoléptico complejo y profundo, perfecto para quienes aman los sabores intensos y bien estructurados. Aspecto: Forma cilíndrica tradicional con corteza dura. Pasta de color amarillo pajizo intenso, sin ojos o con ojos pequeños. Estructura: Granulosidad bien evidente, consistencia compacta y muy quebradiza, con numerosos cristales de tirosina que enriquecen la textura y ofrecen un crujido natural. Olor y aroma: Complejos e intensos, con notas de frutos secos, caldo de carne y un toque especiado de nuez moscada, típicos de una larga maduración en montaña. Sabor: Con una salinidad predominante y menos dulzura, está acompañado de un ligero picante que añade profundidad e intensidad al gusto. Maduración: 30 meses. Maridajes recomendados: miel de castaño, perlas de vinagre balsámico de Módena IGP y trufa, compota de higos y vinagre balsámico de Módena IGP, gelatina de vinagre balsámico de Módena IGP, crema de vinagre balsámico de Módena IGP y frutos del bosque, puré de arándanos silvestres, Savòr Modenese, cerveza Doppelbock o cerveza oscura, vinos como Barolo, Amarone y Riesling de montaña, pan integral o crostinis rústicos. Ideal para degustar puro o acompañado de frutos secos y vinos tintos con cuerpo para un maridaje sofisticado. Se recomienda un cuchillo almendra para quesos curados, perfecto para romper el queso manteniendo su textura quebradiza.