Descripción
El Salame Felino IGP de Umberto Boschi es un producto exquisito y de alta calidad, reconocido con la Indicación Geográfica Protegida que certifica su autenticidad y tradición. Empaquetado en un formato generoso de 900g, este salame se distingue por su sabor intenso y envolvente, obtenido gracias al uso de carnes porcinas de primera elección y a una sabia mezcla de especias. Sus características principales incluyen una consistencia suave y compacta, con un porcentaje justo de grasa que lo hace suculento al paladar. Perfecto para disfrutar como aperitivo, el Salame Felino de Umberto Boschi también se presta para enriquecer ensaladas, bocadillos o tablas de embutidos, aportando un toque de auténtico sabor italiano a cada plato. Un producto que satisfará los paladares más exigentes y que se destacará por su calidad en cada ocasión. Maridajes: Para acompañar de la mejor manera el Salame Felino IGP de Umberto Boschi, te recomiendo combinarlo con quesos de pasta dura como el Parmigiano Reggiano o el Pecorino Toscano. Estos quesos contrastan perfectamente con la salinidad y la consistencia del salame, creando un equilibrio de sabores delicioso. Además, puedes completar el maridaje con aceitunas mixtas y un buen pan rústico, que realzarán aún más el sabor intenso y aromático del Salame Felino IGP. Esta combinación seguramente será apreciada por tus clientes y hará que la experiencia culinaria sea aún más memorable. ¡Buen trabajo con la ficha de producto para el e-commerce! Conservación: Conservar en refrigerador Elaboración: La preparación del Salame Felino IGP implica la molienda de la carne a grano medio, combinada exclusivamente con sal marina y pimienta negra en grano. Para este propósito, se utiliza el raro "trito di banco", un corte único encontrado en la subpaleta del animal, del cual se obtiene apenas poco más de 1 kg por ejemplar. En el proceso de producción del Salame Felino IGP, se evita la adición de grasa; al contrario, durante la fase de recorte a mano, se elimina cuidadosamente. Aunque es un producto de charcutería, el salame resulta notablemente magro y es de los más saludables en el mercado. Se prefiere utilizar solo cortes de cerdo seleccionados para el jamón de Parma, evitando carnes extranjeras o de calidad inferior. Tal atención permite garantizar la alta calidad del producto final. Después de mezclar la carne con las especias, el Salame Felino IGP se embute en tripa de cerdo completamente natural (conocida como "gentile" o "culare") y se ata a mano con cuerda de fibra natural. Luego, se somete a un lento proceso de maduración en ambientes tradicionales.