Un jabón para rostro y cuerpo, obtenido mediante un proceso artesanal en frío, completamente natural, riquísimo en aceites vegetales de altísima dermocompatibilidad, y libre de aditivos y conservantes químicos, tan dañinos para la piel y el medio ambiente. En resumen, el jabón como se hacía antes, hijo de una larguísima tradición casera. Una formulación simple pero lujosa, rebosante de hidratación, cuidado y nutrición incluso para las pieles más sensibles y delicadas. Es un producto unisex, deportivo y versátil, muy cómodo para llevar de viaje y usar en el gimnasio, piscina, o simplemente para colgar en la ducha, evitando molestos halos en las superficies de apoyo. La fragancia que emana es única: una nube de incienso y especias, cálida, envolvente, meditativa... y su aspecto 'marmolado', en tonos de verde y blanco, revela geometrías y matices diversos a medida que se consume... ¡un espectáculo siempre nuevo! Este jabón sólido ecológico llega envuelto en una película de bioplástico compostable, para desechar en el contenedor de residuos orgánicos. El resto es todo cartón.