Este queso semigraso de pasta granulosa proviene de los altiplanos del Trentino. Es un producto lácteo antiguo y hasta la Primera Guerra Mundial era el único queso que se usaba para rallar e incluir dentro de los canederli. El Vezzena conserva una suavidad y una untuosidad excepcionales, liberando aromas particulares según el período de pastoreo. Los expertos lo distinguen del Asiago de allevo por una constante nota olfativa de cebollino.