Los tajarin con trufa son un plato típico piemontés, refinado y elegante, pero sobre todo sencillo de preparar. Se trata de un tipo de pasta típico de Piamonte y pueden servirse también secos o en caldo. El toque de refinamiento y sabor se da con la combinación con la trufa blanca de Alba, que gracias a su inconfundible aroma convierte este plato en un gran clásico otoñal de la cocina piemontesa. En combinación con el Barolo, de color rojo granate con reflejos anaranjados. En nariz es complejo, afrutado, elegante, intenso, especiado, etéreo. En boca es austero, armónico y persistente con un excelente cuerpo.
Dispón sobre una tabla de madera la harina en forma de 'volcán', formando un hueco en el centro. Vierte en el hueco las yemas, el agua, añade la sal y amasa enérgicamente a mano la mezcla.
Una vez que esté lisa y homogénea, envuélvela en film y déjala reposar durante 2 horas en el refrigerador.
Saca la masa del refrigerador media hora antes de utilizarla. Ahora depende de ti elegir si estirarla con rodillo o con máquinas para estirar pasta.
Es importante que para el clásico tajarin piemontés, la pasta sea muy delgada, y que se corte finamente casi a 'cabello de ángel'.
Una vez que tengas los tajarin, cuécelos rápidamente en agua hirviendo, teniendo mucho cuidado de que no se cocinen demasiado y saltéalos en la sartén con mantequilla, parmesano y un chorrito de agua de cocción.
Sírvelos y ralla por encima la trufa blanca.
Barolo
Italia, Piemonte
Energía (kcal) | 341,7 |
Carbohidratos (g) | 17,83 |
de los cuales Azúcares (g) | 0,47 |
Grasas (g) | 24,12 |
de los cuales saturados (g) | 9,24 |
Proteínas (g) | 14,16 |
Fibra (g) | 0,59 |
Venta (g) | 0,04 |