El queso se enriquece con sabores frescos y decisivos: cebollino, hierba peperina, tomillo, menta, romero y chile picante. Estas hierbas silvestres se cultivan de manera orgánica, preservando su sabor y propiedades originales. También los rebaños autóctonos de los cuales proviene la leche crecen en los pastos verdes entre el Altiplano de Laceno y los Montes Picentini, alimentándose de heno de alfalfa y hierba médica, garantizando un producto genuino y de alta calidad. El pecorino bagnolese envejecido con una mezcla de sabores se madura durante aproximadamente 9 meses, el tiempo necesario para obtener un color amarillento, una pasta semidura y un sabor ligeramente picante, acompañado del sabor de las hierbas aromáticas. Ideal para una comida completa y rápida o para enriquecer una tabla deliciosa.