La Sopressa Veneta Clásica (en esta página sin ajo) del Salumificio Freoni Danzi es un producto curado de carne de cerdo italiano puro, embutido en una tripa natural y atado manualmente con un cordel. Su alta calidad se reconoce por la compactación al tacto que, unida a la suavidad al corte, permite que se derrita en el paladar. El salami veneciano no debe presentar una dureza elevada al corte y al paladar, sino que debe ser agradable y delicado, garantizando un sabor con intensa percepción de curado, sabroso pero no salado. Existen diversas evidencias que demuestran el antiguo origen de la Sopressa, embutido clave de la tradición culinaria veneciana. La más importante data de 1577, año en que el pintor Jacopo da Bassano realizó la pintura “Cristo en casa de Marta María y Lázaro” en la que Lázaro aparece cortando un embutido muy similar a una Sopressa. La Sopressa veneciana tiene una sola p en el nombre que la distingue de otras soppresse, típicas del sur de Italia. Se obtiene a partir de las partes nobles del cerdo: coppa, paleta, panceta, lomo y muslo. Cada provincia veneciana tiene su propia Sopressa, sus orígenes parecen estar en Vicenza y las diferencias entre las distintas producciones provinciales residen en el diferente uso del vino en la mezcla. El secreto detrás de una Sopressa de calidad es la capacidad de embutir sin dejar huecos; los maestros de antaño lo hacían a mano, hoy en día se utilizan máquinas que garantizan un embutido uniforme.
Gastos de €28,90, gratis a partir de €210,00
La Sopressa Veneta Clásica (en esta página sin ajo) del Salumificio Freoni Danzi es un producto curado de carne de cerdo italiano puro, embutido en una tripa natural y atado manualmente con un cordel. Su alta calidad se reconoce por la compactación al tacto que, unida a la suavidad al corte, permite que se derrita en el paladar. El salami veneciano no debe presentar una dureza elevada al corte y al paladar, sino que debe ser agradable y delicado, garantizando un sabor con intensa percepción de curado, sabroso pero no salado. Existen diversas evidencias que demuestran el antiguo origen de la Sopressa, embutido clave de la tradición culinaria veneciana. La más importante data de 1577, año en que el pintor Jacopo da Bassano realizó la pintura “Cristo en casa de Marta María y Lázaro” en la que Lázaro aparece cortando un embutido muy similar a una Sopressa. La Sopressa veneciana tiene una sola p en el nombre que la distingue de otras soppresse, típicas del sur de Italia. Se obtiene a partir de las partes nobles del cerdo: coppa, paleta, panceta, lomo y muslo. Cada provincia veneciana tiene su propia Sopressa, sus orígenes parecen estar en Vicenza y las diferencias entre las distintas producciones provinciales residen en el diferente uso del vino en la mezcla. El secreto detrás de una Sopressa de calidad es la capacidad de embutir sin dejar huecos; los maestros de antaño lo hacían a mano, hoy en día se utilizan máquinas que garantizan un embutido uniforme.